ÉL

Un ser, una personita,

existen muchos en el mundo,

alguien que no tiene nada

de particular a simple vista,

Así me recordaba mi madre,

si es verdad, hay otros seres

pero no hay para mí otro igual.

Tuve el honor,

de conocer a ese ser tan maravilloso,

de compartir tiempo (que no volverá) con él.

Tuve la santa fortuna, de que él me vea

Me vea como yo quería que me vea,

con esa mirada, su mirada

dedicada solo para mí,

donde sus pupilas brillan

como ese brillo único que tiene cada estrella

en una dulce noche de invierno

y esa sonrisa, dientes tal vez no del todo alineados,

ese gesto que sabe cuando sacar,

ya que es capaz de contagiarlo rápidamente,

esa silueta que formaban sus labios

que ilumina en mí, y no se quita en horas;

cada vez que le decía un “te quiero” o

un abrazo inesperado surgía cuando más lo necesitaba.

Un ser, que siendo malo,

tal vez solo aprendió a demostrar menos,

aunque me daba toda su ternura,

indirectamente ablande su corazón,

confió en mí de la manera más natural y tierna,

la coraza que resguardaba su corazón,

se fue cayendo de a poco.

Pude ver de cerca, lo que muchos ignoraban,

lo que muchos creían que veían pero no veían,

vi más allá, su alma, su interior.

Tal vez algo perverso, algo maligno, despiadado,

Pero a la vez, lo más tierno, lo más adorable,

aunque a primera vista, inimaginable.

Algo totalmente impredecible,

tan fantástico que nadie se atrevió a descubrir.

Pude ver que ese ser, tenía un valor honorable,

que nadie había reconocido.

El respeto, un respeto realmente admirable

Sus manos, tan pequeñas, tan rollizas.

Esas que me sostenían en cada caída,

y ofrecía su mano para luego besar la mía.

Esos sus brazos que me acurrucaban

Como niña pequeña, sintiéndome una petiza,

una sensación de cariño crecía dentro mío,

sin saberlo, sin quererlo, nació el amor.

Un acto, en el cual me separaba de este mundo,

pudo hacer lo que solo los libros lograban conmigo.

Me llevaba a ese lugar donde solo estábamos los dos,

“nuestro lugar”, podría decirse.

Cuando escribo estas líneas, me recuerdo a mí,

Yo no hablaba, ni escribía

Toda tímida, todo absorta en mi propio mundo.

Pero ese ser, me hace abrir lo más profundo de mi alma

saca todos estos versos, todo mi amor, también oculto,

que tan solo él inspiró, porque es él a quien quiero.

Un ser que sin imaginarme se volvería mi vida,

sin quererlo se adentro en mi mundo.

Recuerdo esos camino que juntos transcurrimos un día.

Oh! Que alegría, como saltaba mi corazón,

Él me tomaba la mano, y sentia que podia volar,

algo irracional para aquel que piensa,

pero no para quien siente con cada pedazo de su corazón.

Una promesa marcada,

un día corriente para muchos,

una simple fecha, pero él la hace singular,

un día especial para nosotros.

Me sigo preguntando ¿cómo llegué a conquistarlo?

¿O él me conquistó a mí?

La forma en que me enamore de él,

Hasta estos días es indescriptible,

ni yo me entiendo, solo sé lo que siento y es verdadero,

aunque todo pasó tan rápido, de una forma fugaz,

Primero lentamente, luego de golpe,

como cuando caes en un sueño profundo,

mientras tratas de dormirte y de repente sucede.

Es tan extraño, pero a la vez tan mágico,

Me enamore de él, no por su físico,

Eso ni siquiera importa, en realidad.

Me enamoré por lo que llevaba dentro,

ese lado oculto que no dejaba que vean,

y me lo mostró a mí, su alma.

Su luz y su oscuridad.

Me enamore de él, es mi verdad

y no tengo miedo de expresarlo,

en tan lindos versos.

No pretendo escuchar a la gente,

o a él cuando me dice que no es hermoso,

es porque él no se ve a través de mis ojos.

La sociedad se equivoca,

impone estereotipos,

que a él le afectan

y duele no poder quitarle esas ideas.

La belleza no es lo superficial o

lo que nuestros ojos puedan ver,

va más allá de todo eso,

la belleza está dentro de ti,

solo hay que sacarla a relucir,

su alma y también en ese lugar llamado corazón.

Y que de eso yo, me enamoré, perdidamente y sin querer,

Me enamoré de su inmenso corazón,

que oculta debajo las tinieblas.

Y sus besos en la frente, tan cálidos,

que dejan ardiendo mis mejillas y sabiendo lo que había causado,

sonreía como un niño cumpliendo su cometido.

Esos que me transmitían confianza,

No tenía nervios al hablar o mirarle

solo una sensación de paz y tranquilidad,

que me llenaba toda en sí

Convirtiéndose en mi felicidad,

mi tristeza, mi enojo y todo mi amor.

Caminábamos por los andas de la alameda,

observar el paisaje para que no se de cuenta,

de lo nerviosa que estaba y que él era el culpable.

Luego, concentrarse en su mirada,

como si fuera mi único objetivo,

aparecen cosquillas inesperadas,

cada vez que un tema de que hablar terminaba.

Juegos y risas, que hacen ver más allá de lo esperado

Formamos una historia, nuestra historia,

nueva y con muchos retos por delante.

Tan única, tan diferente al resto,

porque la diferencia somos nosotros,

Solo nuestra historia, donde escribimos él y yo,

es mi compañero, hasta el fin de los tiempos

Está presente en mí, en cada pensamiento,

en un suspiro que se me escapa

cuando pienso en que haré al verlo.

Es tan profundo todo este sentimiento que llevo dentro

y tan mágico lo que siento.

A veces incomprensible, a veces solo sentirlo

No creo tener las palabras más exactas para definirlo,

pero en mi intento, te dedico este poema

Nuestro primer beso,

¿quién tomó la iniciativa? Pues ya me olvidé,

solo recuerdos los nervios míos, guardados solo para mí,

que a las justas salían a relucir en un temblor en mis manos,

tus ojos fijos en mí, pegaste tu nariz junto a la mía,

estabas seguro de lo que hacías aunque pensabas en mí,

aunque pensé en apartarme, solo me dejé llevar,

estaba indefensa, pero ambos estábamos de lo que queríamos.

No se sabe como describir algo que solo se siente al cerrar los ojos,

unos segundos que se alargan por ser la primera vez.

Una música de fondo en el exterior,

son unos aviones pasar a lo lejos.

No importa nada, solo ese preciso momento

Por ese corto break me teletransporto a un lugar

Un lugar que olvide, es ese lugar de que muchos reclaman

Pero pocos llegan, la felicidad

Me llevo ese ser a donde mi mente había olvidado,

puedo decir que fue único hermoso maravilloso especial majestuoso

Pero aún así faltarían adjetivos para describirlo

Ese beso me demostró que mis sentimientos eran bien recibidos

Aquel día no pude dormir pensando en el

Como lo venía haciendo desde muchas veces antes, pero no se lo dije

sus ojos, esos sus ojos

Y es que no entiendo, qué poder tienen sobre mí,

que solo quiero voltear la mirada, guardar en mi mente,

esos instantes de nerviosismo pero a la vez llenos de seguridad.

Como diciendo: “Me importas”, aunque yo no me lo crea del todo.

Me creía mis propias mentiras,

me importabas no había duda

Nose como, ni donde, ni cuando

Pero pasó, de pronto solo,

percibí que me tomabas de la mano y eso era amor.

Pero era difícil creer que tú sentías igual,

porque una cosa eran mis sentimientos ocultos,

y otra, que tú sintieras algo parecido.

Pero sin querer resultó ser aceptado

Y correspondido, así de bella es la vida

que hermoso es el amor, señores.

Cuando es correspondido y que siga así,

Estuvo siempre ahí,

más cerca de lo que crees

y oculto en las sombras de los temores e inseguridades

Que hoy pude ver, observar con detenida particularidad.

Me enamore, señores de ese ser

y nose como explicarlo,

todo esto es muy raro y nuevo para mí,

es así como las personas decían del amor: irracional,

saber que quiero a alguien

y ese alguien me quiere a mí,

saber que una persona que parece tan normal

me haga sentir tantas cosas bonitas juntas,

suena ideal como creado por mi mente,

aunque saber que solo él,

puede convertir un día de lluvia

en un día soleado,

que él me haga creer en el amor,

cuando puse mil y una excusas para proteger del dolor,

a este corazón que pasó por mucho también,

y que solo pensaba que el amor traería más dolor…

lo dejé al descubierto para él,

ya sea que lo llené de amor

o lo devuelva a la realidad,

Cerrando mi ser para no caer

tapando mis ojos,

me negué ante mis sentimientos,

pero sucedió, eso era amor

aunque no lo supe en un principio,

me quedé en mis pensamientos,

un largo rato, mi terquedad no quería aceptarlo,

y al final me convenciste, ya me importabas.

Ya eras parte de mi ser

aquel ser que veía pasar por la alameda,

se había vuelto para mí, mi mundo,

tal vez suene exagerado,

pero cuánto era el aprecio que le tenía

todo esto era tan magnífico

quererlo , idealizarlo

pero mucho más hermoso,

captarlo en su esencia más pura,

todo desde mi punto de vista,

se convirtió en el motor y motivo

de cada uno de mis días

Junto a ese ser, pude sentir y vivir,

lo que tal vez nunca sentí en estos años de mi vida,

la belleza de los tres niveles

un te quiero, risueño

un te adoro, venerable

y un te amo, realmente deslumbrante.

No caben los vocablos para manifestar,

la preciosa manera en que

solo los fonemas pronunciados

por las curvas de sus labios

me hacían percibir todo de él.

Pero Dios, cuanta felicidad

me llena con solo oir su nombre ahora.

Amarlo, sentirlo mío,

y aunque algunos factores,

me hagan estremecer,

sé que él ahí estará para mí

y yo estaré para él,

no hay obligación,

solo un instinto que nace del corazón.

Y es que con su llegada,

por cierto improvisada,

cambió mi vida y le dio otro significado,

es como empezar de cero,

mi mente está en blanco con respecto a este tema,

volver a escribir mi historia

con solo un diferencia

ahora él pertenece a ella.

Amo esto que tengo con él,

el momento lo hace especial,

los sucesos lo hacen fascinante,

me encanta todo aquello

de aquel ser.

No se,

como logra mantenerse en mis pensamientos,

todos los días y horas,

¿es qué acaso me ha hechizado?

¿y cómo lo ha hecho?

Varias veces al día me pregunto

¿Puede uno sentirse feliz

al encontrar a una persona

que te ame tanto como tú

lo amas a él?

Pero la verdad , la felicidad

no es el única emoción o conmoción

lo que puede producir dentro de mí,

Detallar tal hazaña sería complicado.

Y no porque no entienda mi sentir,

sino que son tantas cosas buenas juntas

que ni este poema podría describirlo

y eso que lo estoy intentando mucho.

Sin embargo, de algo me aseguro,

de que este tiempo escribiendo de él,

no ha sido en vano, porque...

Ese ser me hace sentir completa.

Ese ser es la mitad que me faltaba y que no buscaba.

Ese ser es como mi oscuridad y luz a la vez.

Ese ser es mi hogar.

Colaboración: Melany Chuquimbalqui